El vicepresidente de la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), Luciano Fusaro, se refirió al aumento de las tarifas en el transporte metropolitano, que de acuerdo al nuevo cuadro tarifario, el boleto mínimo de colectivo, pasará de $ 6 a $8 hasta tres kilómetros, representando un aumento de 33,3%.
“Queremos transmitir la verdadera realidad que atraviesa el sector, es un tema que va más allá del valor de la tarifa”, señaló Fusaro.
Y agregó que “entendemos que su valor es importante por el impacto social que tiene, pero también hay detrás de eso hay una operación que debe llevarse adelante con principios de seguridad y eficiencia y tiene un costo”.
Respecto a dicho costo, Fusaro comentó que actualmente, lo afronta en su mayor parte el Estado, pero asimismo, no está siendo reconocido en su totalidad. En 2017 el 30% del costo del sistema, fue cubierto por la tarifa que abona el pasajero.
Como explicó Fusaro, “en términos históricos es una tarifa muchísimo más barata de lo que se supo pagar hace 20 años, cuando valía alrededor de 1 dólar. Eso es gracias a las políticas de subsidio que se implementaron en los últimos años, que les permitió a los pasajeros viajar a un costo más bajo de lo que cuesta en el resto del mundo”.
Fusaro sostuvo que los costos reales que implica mover el sistema de transporte, es de $20,41 por pasajero en el área metropolitana.
Y resaltó que “no queremos subsidio, hay que dárselo a la gente que necesita, al laburante y debe tomar dos o tres viajes para llegar el laburo. Nosotros pretendemos que las condiciones económicas y regulatorias del sector, sean las apropiadas para brindar el servicio”.
Además, Fusaro lamentó que “no hay una situación fiscal holgada, tampoco en la tarifa se le puede trasladar todo al usuario y, en ese ecuación, la variable y el eslabón más débil que absorbió el esfuerzo, fuimos nosotros”
