Luego de un tratamiento que duró más de tres meses, finalmente el oficialismo logró aprobar la Ley de Presupuesto 2019 en la Ciudad de Buenos Aires. Con índices negativos, el proyecto estimó que habrá una caída de la actividad económica del 0,5 por ciento, una inflación del 23 por ciento y un tipo de cambio que llegará a 40,10, cifras coincidentes con el presupuesto votado en el Congreso nacional a mediados de mes.
Como viene pasando, no hizo falta apoyo alguna de bloques de la oposición, ya que los 34 legisladores de Vamos Juntos fueron suficientes para lograr la salida de la Ley de leyes. Los integrantes de Unidad Ciudadana, el Frente de Izquierda de los Trabajadores, Bloque Peronista, Autodeterminación y Libertad y el Partido Obrero rechazaron el proyecto, mientras que el GEN, Partido Socialista, Evolución y Mejor Ciudad se abstuvieron.
El pago de los intereses de la deuda fue uno de los principales temas de conflicto ya que que llegará al pico histórico del 8 por ciento, representando 25.815 millones de pesos y un aumento del 77 por ciento como resultado de la devaluación de este año. «La única inversión va a ser pagar el interés de la deuda y la seguridad, lo que discutimos estos días no va a terminar funcionando», aseguró sobre el objetivo del presupuesto la legisladora de Unidad Ciudadana, Victoria Montenegro, al que lo describió como «de ajuste».
Es que una de las mayores beneficiadas fue la Cartera del ahora ministro Diego Santilli, ya que destinarán 4100 millones de pesos, con una proyección de construir nuevas comisarías con un valor de 1463 millones.
Por otro lado, las áreas que mayores pérdidas sufrirán serán industria y comercio, con un descenso del 58,7 por ciento, cultura (-22,9), turismo (18,9) y una caída sostenida de la participación de Educación y Salud. En diez años, su representación pasó de ser del 50 por ciento a alrededor del 30 para 2019.
