Los comercios de la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires, no cargarán tarjetas SUBE durante los días miércoles, jueves y viernes de esta semana, en forma de protesta contra la prohibición de cobro para el recargo del servicio.
La Cámara de Kiosqueros Unidos sostiene que “los kioscos son puntos de venta fijos necesarios para que funcione el sistema de transporte público y estos asumen un riesgo elevado al desarrollar esta tarea”.
La Cámara también reclama un ajuste de la rentabilidad a favor del kiosquero y el control correspondiente a las empresas para que cumplan con el pago correspondiente.
Los kiosqueros optan por brindar este servicio SUBE de forma voluntaria para amortizar la crisis del rubro: “hasta los de la cadena Farmacity venden golosinas al igual que un kiosco, no debiendo dedicarse a este tipo de mercadería”, expresan.
“Detrás de los más de 12 mil kioscos hay miles de familias, y su fuente de ingresos peligra por la persecución de denuncias impulsadas por una ley, que culpa al último eslabón del sistema, cuando nadie investiga quiénes son los que se quedan con el dinero fruto del trabajo del kiosquero del sistema SUBE».
